5 de mayo de
2017
LA GRASA EN LA ZONA ABDOMINAL Y EL REMEDIO JAPONÉS La grasa abdominal genera múltiples factores de riesgo cardiovascular y un gran aumento de la mortalidad. Un estudio publicado en la revista Annals of Internal Medicine señala la grasa abdominal como factor de riesgo de mortalidad, por encima incluso de la obesidad o el sobrepeso. Tras analizar datos de más de 15.000 personas, los investigadores han observado que las personas con obesidad central (cuando la grasa se acumula en el abdomen) tienen el doble de riesgo de mortalidad que las personas que "solo" tienen sobrepeso u obesidad. Y en el caso de las mujeres, con una distribución de grasa similar, el riesgo es 1,5 veces mayor. Este estudio señala que no por tener un Índice de Masa Corporal (IMC) normal, uno se puede considerar sano y libre de riesgos [aunque es un índice cada vez más cuestionado, la Organización Mundial de la Salud (OMS) define esta medida como la relación entre el peso y la talla, y se calcula dividiendo el peso de una persona en kilos por el cuadrado de su talla en metros (Kg/m2). Según la OMS, el IMC de un
adulto normal debería estar por dejabo de 25]. De hecho, en análisis
científicos previos ya se había relacionado el perímetro
cintura-cadera con un mayor riesgo cardiovascular y de diabetes, pero este,
por primera vez, ha cuantificado el riesgo de muerte.
DATOS - ANNALS OF INTERNAL MEDICINE
Un estudio de la Universidad de Hampton reveló que la combinación de yoga con respiraciones profundas llevaba a una importante pérdida de peso El actor japonés Miki Ryôsuke ha hecho famoso un método para eliminar grasa de la cintura que se ha convertido en todo un fenómeno viral. Cuenta el intérprete que el resultado surgió de forma casual, como efecto secundario de un ejercicio recomendado por su médico para aliviar los dolores de espalda que padecía. Ryôsuke afirma que con él ha llegado a perder hasta 13 Kg y 12 centímetros de cintura en apenas unas semanas. La ejecución del ejercicio se basa en la adopción de una postura particular que se deberá acompañar de una fuerte espiración con la que se expulsa todo el oxígeno contenido en las vías respiratorias. Ryôsuke asegura que basta con llevarlo a cabo entre 2 y 10 minutos al día para sus efectos se hagan notar. 1. Sitúate de pie y adelanta una de tus piernas, colocando la otra en una posición más rezagada respecto al resto del cuerpo.Una segunda variante consiste en mantener la espalda recta, tensando los glúteos y colocando una mano delante del abdomen y otra en la espalda.
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