¿CÓMO ES QUE NO VEN A DULCINEA, Y SÓLO VEN A ALDONZA LORENZO?. Por eso se volvió loco don Quijote. Una mujer es la misma mujer, pero para un hombre es su Dulcinea y para otro una más, Aldonza Lorenzo. Pedro Salinas en su conferencia “Lo que nos queda del Quijote” afirmaba que don Quijote y Sancho forman un todo inseparable, un claro binomio, una sola persona. Cecilia Hernández de Mendoza, en su biografía de Dulcinea del Toboso, señala que en el Qiujote existe un trinomio simbólico integrado por un solo personaje cuya denominación podría ser Sancho-Quijote-Dulcinea: el hombre de la realidad, el hombre del ensueño, la resultante del ensueño. Y señala “para quienes lejos de ver en las mujeres Aldonzas hechas Dulcineas, pretenden trocar a las Dulcineas en mozas aldeanas y vulgares; perfecta para quienes no ven las Aldonzas sino las Dulcineas; mujer, finalmente, para quienes en ella perciben la unidad maravillosa de Aldonza, Dulcinea y la moza aldeana…” Y es que no hay que olvidar que Dulcinea había sufrido un encantamiento y fue transformada en una moza más, pero todos sabemos que Dulcinea es una y no otra, y que ella siempre es Dulcinea, y “en su hermosura, ninguna la yguala, y en la buena fama, pocas lallegan”. Por eso se volvió loco don Quijote, porque desde entonces vivió sólo para quitarle el encantamiento y conseguir que ella comprendiese que era Dulcinea. En el capítulo XXV del libro I, cuando Sancho se sorprendió de que la princesa Dulcinea fuera la moza que él había conocido en el Toboso, dice el Hidalgo: Assí que Sancho, por lo que yo quiero a Dulcinea del Toboso, tanto vale como la más alta princesa de la tierra. Sí, que no todos los poetas que alaban a sus damas, debaxo de vn nombre que ellos a su aluedrío les ponen es verdad que las tienen. ¿Piensas tú que las Amarilis, las Filis, las Siluas, las Dianas, las Galateas, y otras tales de q los libros, los romances, las tiendas de los barberos, los teatros de las comedias están llenos, fueran verdaderamente damas de carne y hueso, y de aquéllos que las celebraron? No por cierto sino que las más se las fingen por dar sujeto a sus versos y porque los tengan por enamorados y hombres que tienen valor para serlo. Y assí bástame a mí pensar y creer que la buena Aldonza Lorenzo es hermosa y honesta: y en lo del linaje importa poco, q no han de yr a hazer la información del, para darle algún habito y yo me hago cuenta, q es la más alta princesa del mundo. Porque has de saber Sancho, si no lo sabes que dos cosas solas incitan a amar más que otras, que son la mucha hermosura y la buena fama y estas dos cosas se hallan consumadamente en Dulcinea, porque en su hermosura, ninguna la yguala, y en la buena fama, pocas lallegan. Y para concluyr con todo yo imagino que todo lo que digo es assi, sin que sobre ni falte nada. Y píntola en mi imaginación como la deseo, así en la belleza como en la principalidad: y ni la llega Helena, ni la alcanza Lucrecia, ni otra alguna de las famosas mujeres de las edades pretéritas, Griegas, Bárbara o Latina. Y diga cada vno lo que quisiere, q si por esto fuere reprehendido de los ignorantes, no seré castigado de los rigurosos.
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