SER PADRES.

DESOBEDIENCIA Y AGRESIVIDAD EN NIÑOS HIPERACTIVOS.

Niños inquietos que no paran, no consiguen sentarse a estudiar, y no escuchan.

Los síntomas que caracterizan el Déficit de Atención con Hiperactividad son la impulsividad, la hiperactividad y la baja atención. 

Pero el síntoma más característico es que su comportamiento es infantil para su edad.

Son desorganizados y no se concentran ni consiguen permanecer sentados para hacer los deberes.

Son marcadamente impulsivos y no recapacitan sobre las consecuencias.

En todas las conversaciones interrumpen a los demás.

Pierden cosas a diario.

Pero lo peor es que son muy desobedientes y en muchos casos agresivos.

Los padres son los culpables a los ojos de muchos expertos, pues fomentan esta conducta afianzando el mal comportamiento. Desde la perspectiva de los padres es que se pierde la paciencia y se acaba cediendo para no hacer una locura. Un ejemplo es consentir un capricho para ahorrarse una rabieta. El niño aprende que gritando y tirando cosas consigue todo lo que quiere.

Los expertos recomiendan a los padres imponer rutinas, no castigar, pues el hiperactivo no funciona al sentirse presionado, más recompensas, enfatizar lo que hace bien, no llevarle a situaciones de estrés (aunque ellos hayan puesto antes a los padres al borde del ataque de nervios), paciencia y mantenerlo ocupado.

Las causas que provocan este trastorno no se conocen bien y pueden ser muy variadas: neurológicas, genéticas o ambientales.
 

SÍNDROME DE HIPERACTIVIDAD Y DÉFICIT DE ATENCIÓN 

Perfil de los niños hiperactivos a diferentes edades.

Criterios de diagnóstico recomendados por la Asociación Psiquiátrica Norteamericana en su DSM- I. 

Síndrome de hiperactividad/déficit de atención. Criterios de diagnóstico
 

  • Déficit de atención
  • Si fracasa cuando tiene que prestar atención a detalles o si comete errores por descuido.
  • Si no está atento en sus tareas o juegos.
  • Si parece no escuchar cuando se le habla.
  • Si no sigue instrucciones ni concluye sus tareas escolares. Si no organiza sus tareas ni sus actividades.
  • Si evita o rechaza tareas que le demanden esfuerzo mental continuo.
  • Si pierde sus cosas o sus útiles escolares. Si se distrae fácilmente.
  • Si olvida sus actividades diarias.


Hiperactividad
 

  • Si golpea constantemente con las manos y/o con los pies o no está quieto en su sitio.
  • Si se levanta de su sitio en clase.
  • Si es excesivamente corredor o trepador.
  • Si no permanece quieto durante sus juegos ni en sus ratos de ocio.
  • Si a menudo está "listo para partir" o actúa "sobre la marcha" (permanentemente apurado).
  • Si habla excesivamente.


Impulsividad
 

  • Si interrumpe o contesta una pregunta antes que haya sido completada.
  • Si no espera su turno.
  • Si interrumpe o se entromete en conversaciones o juegos de otros.


Clasificación
 

  • Si el niño tiene 6 o más síntomas de déficit de atención y menos de 6 de hiperactividad e impulsividad el diagnóstico será de un SH/DA tipo déficit de atención.
  • Si tiene 6 o más síntomas de hiperactividad e impulsividad y menos de 6 de déficit de atención será de un SH/DA tipo hiperactivo-impulsivo.
  • Si tiene 6 o más síntomas de déficit de atención y 6 o más de hiperactividad e impulsividad será de un SH/DA tipo completo o combinado.


TERAPIA

  • terapia psicopedagógica (hábitos de atención y de concentración suficientes y mejorar los problemas de aprendizaje secundarios)
  • terapia de modificación de conducta mediante el entrenamiento a padres y profesores (que procura el control de la hiperactividad y la impulsividad principalmente y mejorar los desórdenes de conducta), 
  • intervención escolar (en el aula o fuera de ella).
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