UN GRANO DE ARROZ TIENE SIETE DIOSES

El cuidado en todo lo que nos rodea y la pérdida de conciencia cuando nos excedemos.
 
Un grano de arroz tiene siete dioses. No malgaste la comida, no malgaste nada, los dioses viven en todo lo que nos rodea, así que debemos ser cuidadosos, tratar o utilizar con cuidado todo.". Estamos rodeados de incontables dioses  "yaoyorozu no kami".

El dios del arroz se llama HIMIKO. El arroz tiene SANJIN  que son tres diosos, DOKUJIN el dios de la tierra, SUIJIN el dios del agua y KAGAMI  el dios del fuego.

Aunque realmente la letra de arroz  está escrita por una combinación de letras of 8, 10 y 8, así que el arroz tiene ochenta y ocho dioses.

Los dioses que están en un grano de arroz se llaman:

SHICHIFUKUJIN 
DAIKOKUTEN el principal de los siente, es el dios de la riqueza
EBISU el dios de la pesca y el comercio
BISHAMONTEN el dios del tesoro
BENZAITEN  la divinidad de la elocuencia, música y arte
FUKUROKUJU el dios de la riqueza y la longevidad
JUROUJIN el dios de la longevidad
HOTEI  el dios de la felicidad.
 
Por eso se bebe sake, porque es un licor de dioses, placentero pero que aturde en el exceso. Por eso lo utilizó Susanowo, el dios  del viento para engañar al dragón y salvar a la princesa del arroz blanco.

Susanowo escuchó a una pareja de ancianos que tuvieron ocho hijas quiénes fueron devoradas una a una, cada año, por el dragón llamado Yamata-no-orochi ("serpiente de ocho picos"). El terrible dragón tenía ocho cabezas y ocho colas. Kusinada o Kushinada-Hime (princesa del arroz blanco) era la última de las ocho hijas.

Susanowo transformo a Kushinada en un peine y la ocultó en su pelo. También ordenó construir una cerca alrededor de la casa, con ocho puertas abiertas en la cerca, ocho mesas colocadas en cada puerta, ocho barriles colocados en cada mesa y cada uno de los barriles lleno con licor de arroz elaborado ocho veces.

El dragón Orochi, al llegar al lugar, quedo fascinado por el licor (sake), lo bebió y durante el estupor que le produjo, Susanowo lo mató, y un río cercano se tornó rojo con la sangre del dragón. Cuando Susanowo cortó el dragón en pedazos, encontró una excelente espada en su cola, tan dura que su propia espada no la había podido cortar. Posteriormente la espada fue presentada a Amaterasu y la llamaron “Ame no Murakamo no Tsurugi” (más tarde llamada Kusanagi). Esta espada sería la protagonista en muchos otros cuentos posteriores pero por hoy ya está bien.