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EQUIVOCARSE
Cuando uno se queda fuera de su
propia vida.
¿No ha tenido usted nunca
la sensación de haber sido expulsado de su vida como cuando nos
apeamos accidentalmente del autobús en la parada que no es? El autobús
o la vida siguen su marcha, alejándose de nosotros, que los perdemos
de vista cuando doblan la esquina. Continúan existiendo, pero en
una dimensión lejana, en la que atraviesan calles o plazas que quedan
fuera ya de nuestro alcance. ¿Y nosotros? ¿Qué hacer
cuando uno se queda fuera de su propia vida?
Juan José Millás en
su columna del periódico el País.
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