LIEBESVERBOT 

Wagner. Seguramente todo empezó el día que ella se fue.

Richard Wagner (Leipzig 1813 – Venecia  1883) 

Todo empezó cuando Wagner era director musical del teatro de la ópera de Magdeburgo y compuso Das Liebesverbot (La prohibición de amar), ópera inspirada en “Medida por medida” de William Shakespeare. Fue descrita por el mismo Wagner como una «grosse komische Oper». El estreno tuvo lugar en el Teatro de Magdeburgo el 29 de marzo de 1836, con el título de La novicia de Palermo (Die Novize von Palermo), que se cambió debido a presiones de la policía local por la cercanía de la Pascua. La primera representación fue un gran fracaso, el protagonista olvidó su parte. Igual resultó la segunda, que debió además ser interrumpida por riñas. El caso es que no se volvió a representar en vida de Wagner. El tema central en la obra es un anhelo de la sexualidad desenfrenada, lo que muestra de nuevo en Tannhäuser, Die Walküre, y Tristán e Isolda. En cada obra, el abandono de los amantes implica un combate mortal con el orden social circundante. En Das Liebesverbot, como es una comedia, el resultado es un final feliz: la sexualidad desenfrenada gana como el carnaval orgiástico de toda la población.

Todo empezó cuando Richard Wagner escuchó por primera vez una sinfonía de Beethoven, enfermó, y, al recuperarse, supo que quería ser músico. No eso fue antes, todo empezó con Das Liebesverbot, seguramente todo empezó el día que ella se fue.

Wagner se había enamorado de la actriz Christine Wilhelmine «Minna» Planer. Después del desastre de Das Liebesverbot, la pareja se trasladó a Königsberg donde ella lo ayudó a encontrar un trabajo en el teatro. Se casaron el 24 de noviembre de 1836. En junio de 1837, Wagner se trasladó a la ciudad de Riga, entonces parte del Imperio ruso, donde se convirtió en director musical de la ópera local. Entonces Minna abandonó a Wagner por otro hombre. Al poco tiempo ella regresó y volvieron a estar juntos, pero ya nunca fue lo mismo y se atormentaron recíprocamente durante treinta años.

Como siempre las deudas y los esposos abandonaron Riga de manera furtiva en 1839. En la huida se malogra el embarazo de Minna y ya no volverá a tener hijos. Se fueron a Londres y fueron víctimas de la tormenta que inspiró “El holandés errante” (Der Fliegende Holländer), basada en una obra de Heinrich Heine. 
 
Después vivieron en París, entre 1839 y 1842

Minna debió soportar las muchas infidelidades de Wagner, el último con la poetisa y escritora Mathilde Wesendonck, que acaba provocando el divorcio. Pero Mathilde inspiró los Wesendonck Lieder. En una carta a una amiga, Minna escribe si el hecho de ser un genio da derecho a ser un bastardo (Hat ein genialer Mann das Recht auch ein Schuft zu sein?).

Minna se hizo adicta al láudano, razón por la cual muere de una embolia en 1866 en Dresde.

Wagner estaba en Marsella, no asistió al funeral y en 1870 se casó con Cosima Liszt. Cósima, fue esposa de Von Bülow y luego de de Richard Wagner y su madre..., qué historia tan interesante la de la madre. ¿La contamos o seguimos?. Los dejamos para otra. Decimos sólo que Cósima era veinticuatro años más joven que Wagner y que dejó a su marido por él.

El 13 de febrero de 1883, Wagner falleció a causa de una crisis cardíaca en Ca' Vendramin Calergi, un palazzo del siglo XVI en el Gran Canal. Su suegro, Franz Liszt, compuso dos piezas para piano solista tituladas La lúgubre góndola, que evocan el paso de una góndola fúnebre cubierta de negro portando a Wagner por el Gran Canal.